¿Qué es la proteína en polvo? ¿Deberías tomarla?
La proteína en polvo es un suplemento alimenticio obtenido de fuentes naturales (albúmina de huevo, suero de leche, caseína o vegetales). Se usa para aumentar tu ingesta de proteína de forma práctica cuando tu alimentación diaria no alcanza o tu ritmo de vida complica cocinar.
Tipos de proteína en polvo
Las más comunes son: albúmina de huevo (ligera y versátil), suero de leche o whey (rápida), caseína (lenta y saciante) y vegetales como soya o mezclas arveja+arroz (útiles si evitas lácteos).
Beneficios
-
Masa muscular y fuerza: aporta aminoácidos para reparar y construir músculo.
-
Recuperación: ayuda a cubrir tu objetivo proteico post-entreno.
-
Sacias más tiempo: puede apoyar el control del apetito y del peso.
¿Debes tomarla?
Depende de tus objetivos y de cuánto proteína logras con comida real. Si te cuesta llegar a tu requerimiento diario o buscas conveniencia, sí puede ayudarte. También es útil después de entrenar o como complemento en una comida con poca proteína.
Uso básico: 20–30 g por toma, mezclada con agua o leche baja en grasa, justo después de entrenar o en la comida donde falte proteína.
Consideraciones
Consulta a un profesional si estás embarazada o en lactancia, tienes enfermedad renal/hepática, alergias o tomas medicamentos. Recuerda: la proteína en polvo complementa, no sustituye, una dieta equilibrada ni el descanso.
¿Tienes dudas sobre cuál elegir o cómo integrarla a tu rutina? Escríbenos y te orientamos según tus metas y hábitos.

¿Quieres saber más? Sigue leyendo aquí